Se conoce como cistitis intersticial a la afección crónica que provoca una presión inusual en la vejiga, habitualmente acompañada de dolor también en la vejiga, y en ocasiones pélvico.
La vejiga, que es el órgano que almacena la orina, se expande y encoge en el proceso de llenado. Cuando ha almacenado toda la orina que es capaz de abarcar, se activan los nervios pélvicos que indican al cerebro la necesidad de orinar.
Ahora bien, una persona que padece de cistitis intersticial tiene un funcionamiento urinario un poco diferente, ya que las señales que llegan al cerebro se mezclan y a nivel físico aumenta la frecuencia de orinar, pero se reduce la cantidad.
Cuáles son los síntomas de la cistitis intersticial
Los síntomas de cistitis intersticial son bastante variados en función del paciente. De hecho, dentro de un mismo paciente, esta afección puede parecer de diferentes maneras a lo largo del tiempo e incluso estar vinculada a factores comunes como el estrés, el ejercicio físico o la menstruación, entre otros.
Algunos de los síntomas más comunes que padecen las personas con cistitis intersticial son:
- Necesidad urgente y constante de orinar
- Micción muy frecuente (también por la noche) y muy a menudo en un volumen reducido
- Molestias durante las relaciones sexuales
- Dolor en la pelvis o entre la vagina y el ano (mujeres)
- Dolor entre el escroto y el ano (hombres)
Cistitis intersticial vs infección crónica de las vías urinarias
A menudo los síntomas que presenta un paciente con cistitis intersticial y los de uno con infección crónica de las vías urinarias se parecen bastante. No obstante, la diferencia básica es que en la cistitis intersticial no se produce una infección en sí misma, y obviamente en la otra afección esta sí tiene lugar.
Ahora bien, en caso de que una persona con cistitis contrajera también una infección, la sintomatología de esta empeoraría de manera considerable.
Tipos de causas de la cistitis intersticial
La causa exacta de esta afección es desconocida, de hecho, cuando una persona padece esta afección, lo más probable es que hayan sido diversos los factores que la han ocasionado, en ocasiones una deficiencia en el revestimiento protector de la vejiga o incluso una fuga en el epíteto pueden irritar las paredes de la vejiga.
Ahora bien, sí existen algunos factores de riesgo que aumentan las probabilidades de padecer cistitis intersticial
- La edad. La mayor parte de los diagnósticos son personas de más de 30 años.
- El sexo. Las mujeres son más propensas que los hombres a contraerla. De hecho, a pesar de padecer los síntomas que hemos detallado en este post, cuando se trata de hombres, lo más probable es que no sea cistitis sino una inflamación de la glándula prostática.
- Trastornos del dolor crónicos. Trastornos como la fibromialgia o el colon irritable pueden estar relacionados con la cistitis intersticial.
Consecuencias de la cistitis intersticial
Algunas de las complicaciones que detallamos a continuación son consecuencia de padecer cistitis intersticial
1. Disminución de la capacidad de la vejiga
El primer problema al que se enfrentan los pacientes con cistitis intersticial es la reducción de la capacidad de su vejiga. Esto es consecuencia del endurecimiento de la pared de la vejiga.
2. Alteraciones emocionales
En el plano emocional, la cistitis intersticial también tiene sus consecuencias. Y es que tanto el dolor crónico como la falta de descanso por las interrupciones del suelo que esta afección puede causar, desembocan muchas veces en una sintomatología depresiva o estrés emocional.
3. Deterioro de la calidad de vida
En efecto, todas las alteraciones que hemos indicado anteriormente merman la calidad de vida la persona. El dolor constante y el aumento de la frecuencia de micción, inevitablemente interfiere en muchos ámbitos de la vida como el social, el laboral, incluso el personal.
Cuándo consultar al médico
En base a la información que has leído en este post, si padeces alguno o varios de los síntomas que se detallan (dolor crónico de vejiga, un aumento de la urgencia y/o frecuencia urinaria) que efectivamente está deteriorando tu calidad de vida, debes ponerte en contacto con un médico de inmediato, ya que solo a través de un diagnóstico personalizado se podrán tratar los síntomas y mejorar así la calidad de vida del paciente.
En INAI contamos con un equipo especializado y profesional en urología para realizar este diagnóstico y ayudar a las personas a recuperar su calidad de vida.