La incontinencia urinaria es una circunstancia bastante extendida en la población adulta y es que en muchas ocasiones es una consecuencia derivada de patologías o, incluso, tratamientos más o menos agresivos indicados para otras enfermedades que acaban provocando la incontinencia como efecto secundario.

Por lo tanto, la incontinencia urinaria puede ser de muchos tipos en función, entre otros factores, de su origen.

Los tipos de incontinencia urinaria varían también si hablamos de mujeres o de hombres.

Pero, antes de analizar los diferentes tipos, es importante que, si crees que puedes sufrir incontinencia urinaria, definida como las pérdidas de orina de forma involuntaria, consultes a un profesional de la medicina ya que podrá diagnosticar la causa y establecer un tratamiento a partir de diferentes criterios:

  • Frecuencia de las pérdidas
  • Cantidad de orina
  • Circunstancias en las que se da la pérdida
  • Afectación a la higiene
  • Afectación a la calidad de vida del paciente

Variedades de incontinencia urinaria

Como hemos comentado anteriormente, podemos diferenciar varios tipos de incontinencia en función de su origen. Este dato es clave a la hora de aplicar el tratamiento adecuado por lo que ponerse en manos de un buen profesional será esencial para poder minimizar las consecuencias más molestas de la incontinencia.

Volviendo a los tipos de incontinencia urinaria, los más comunes serían la incontinencia de esfuerzo, la de urgencia y la mixta. Todas ellas, diferenciadas por la causa que provoca las pérdidas:

  • Incontinencia de esfuerzo. Cuando la presión sobre la vejiga provoca que esta pierda la orina que contiene. Puede pasar al reír, levantar peso, estornudar o realizar alguna actividad física. La causa de este tipo de incontinencia suele ser la debilidad en los músculos del suelo pélvico y una vejiga que no se encuentra en la posición normal.
  • Incontinencia de urgencia. Las personas afectadas tienen unos repentinos deseos de orinar que en ocasiones son incontrolables y parte de la orina se escapa antes de que puedan llegar al baño. Puede estar causada por una vejiga hiperactiva y es más frecuente a partir de los 40 años.
  • Incontinencia mixta. Es la más común en mujeres de mediana edad y en varones sometidos a cirugía. Consiste en la aparición al mismo tiempo de la incontinencia de esfuerzo y la de urgencia.

Existen otros tipos menos frecuentes como la incontinencia por rebosamiento, la provocada por daños neurológicos o la que implica un goteo incontrolable después de la micción. Sin embargo, la gran mayoría de pacientes que requieren de tratamiento para la incontinencia se encuadran en los tipos más habituales: de esfuerzo, de urgencia o mixta.